martes, febrero 10, 2009

caballero de terciopelo

Cuando muera me da igual lo que hagan con mi cuerpo, pueden convertirlo en una obra de arte si quieren, lo dono a Gunther von Hagens …para que con él haga lo que quiera, y después de muerta pueda seguir viajando por todo el mundo y estar más presente incluso que cuando estaba viva. Tambien pueden enterrarme en un bosque del norte, al pie de un árbol grande y hacer una cruz en el tronco, con mis iniciales y la fecha de mi muerte. Pueden quemarme y hechar las cenizas al mar. Pueden llorar y gritar las personas que estén tristes por mi muerte. Pero aconsejo que lo hagan cerca del mar, en la orilla, arrodillados en la arena, o sentados en las rocas, y con el viento en la cara y el ruido de las olas solapando su llanto.

Espero vivir lo suficiente como para llegar a ser vieja, ver a mis sobrinos crecer y experimentar, ver a mis padres envejecer , ver a mis hermanos madurar, encontrar al amor de mi vida, enamorarme, formar una familia, ver a mis hijos crecer, ver nacer a mis nietos, ver como crecen ellos, mientras yo voy haciendome pequeñita pequeñita, y llegar a ver mi pelo blanco y mis viejas manos…

No hay comentarios: